Este proyecto de playa se convirtió en un gran reto por desarrollar una amplia zona social interior y a la vez cuatro dormitorios para la familia. En el primer piso tenemos una sala de estar techada que integra la sala y el comedor con el exterior y a su vez sirven de recibo y transición para acceder a la terraza en el segundo nivel. La familia vive su día en la terraza y por ello tenemos una piscina con solarium, una parrilla amplia y una zona de descanso completa. De noche, la casa tan compacta les permite hacer reuniones al interior pero siempre manteniendo el contacto con la playa y el horizonte a través del estar.