Una vez dentro de las oficinas, tenemos la recepción y el showroom. Desde aquí es posible el ingreso al pasillo/corredor que sirve como circulación común hacia la sala de reuniones VIP o directorio. El planteamiento permite que los despachos se sitúen en los dos laterales de la oficina. En medio de estos dos bloques de oficinas planteamos la zona diáfana en donde tenemos cuatro islas de trabajadores. Finalmente, y como remate, en la zona diáfana hacia la fachada frontal del edificio tenemos las salas comerciales que se pueden integrar mediante puertas de celosía corredizas.